Durante el año 2020, el Ecuador fue uno de los países del mundo más golpeados por la pandemia de Coronavirus. Según cifras oficiales actuales, hay una tasa de contagiados de 1.700 casos por cada 100.000 habitantes. Y de 15.000 personas fallecidas por COVID. Sin embargo, hay que señalar que el exceso de muertes sobre el promedio de los tres años previos asciende a 40.000. De acuerdo con epidemiólogos reconocidos, “el exceso de personas fallecidas este exceso se debería, por un lado, a un incremente proporcional al aumento de la población (incluida la población emigrante de más de medio millón de personas recién llegadas) a muertes debido a carencia de tratamientos o de atención hospitalaria por enfermedades que no pudieron ser atendidas debido a la pandemia, quedando un exceso de muertes probables por COVID de al menos 15.000. Es decir que el dato oficial del Ministerio de Salud de 15.000 muertes por COVID debiera ser en cifras reales de probablemente de 30.000. Esto daría una tasa de mortalidad de 176 por cada 100.000 habitantes. En Ecuador solo se ha hecho algo menos de 1 millón de pruebas, en el sistema público y privado (la población del país es de 17 millones). En cuanto al sistema hospitalario, este momento se encuentra lleno, por lo que la disponibilidad de camas, públicas y privadas, está en crisis. En cuanto a la vacunación, las primeras 8.000 dosis llegadas al país serán destinadas al personal de salud del país. Se espera que en el transcurso del primer semestre lleguen dos millones de vacunas para los adultos mayores, personal de policía y fuerzas armadas y profesores, así como trabajadores de primera línea de los municipios del país.
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